La agonía está aquí dentro
y muere
con esta palabra.
Cruza mis piernas
y desoye tumbas y suspiros.

Se rendirá al epitafio,
sin oxígeno,
antes de acabar.

La vida está aquí dentro
rindiendo su batalla,
silenciosa,
presionando venas y agendando sangre
en su pulsión.

Ninguna de las dos se detiene.

La paradoja del interior
olvida la guerra,
la orgía y el milagro
de sobrevivirse a sí mismo.

Hay innumerables yos
frente a innumerables tús,
una contabilidad infinita
que resta a la existencia
y suma a la vida,
la locura precisa de que
en este instante
un tú y un yo
se hayan conocido.

Semántica

<figura>

<Una imagen>

Retorna el ojo de luz hasta destruir la esfera

Toda la lucidez queda cubierta por una corriente

Eléctrica de doble dirección.

</una imagen>

<párrafo>

Una corriente alterna daba brincos del sofá a la pantalla, pensó en reducir el iris…

</párrafo>

</figura>

La herida estaba antes
de llegar
y fue el camino.

Estrechar ese camino
que empeña tu mirada,
todos los pasos desandados
anulando el objetivo.

Frente a la imagen,
la imagen que en sí misma
                       se contiene
el solo acto
de ver,
                       la luz.

Cómo escribir el fin mismo
que sólo en sí mismo
                        se contiene
ese valor no atribuido
de pasar por la vida
como una letra
que elimina su lenguaje

Y no decirse...
quedarse en silencio
hasta el instante.